s una de las voces más representativa de la nueva generación de intérpretes de tango. Su timbre de mezzosoprano, su voz limpia y llena pero al mismo tiempo, con una tesitura suave y delicada, su buena afinación, son elementos que concurren para generar en el público un clima especial.

Le sobra personalidad, acomoda su interpretación a las singularidades de los versos y, además, no se parece a ninguna otra cancionista. Su repertorio es original y cimentado en la nueva letrística tanguera, lo que le da un sello distintivo.

Son muy pocos los temas clásicos que llevó al disco, sus dos temas más populares, “Ser mina flor de cardo” y “Pompeya no olvida” pertenecen a dos autores jóvenes, Adriana Turchetti, el primero y a Alejandro Szwarcman, el otro, los dos compuestos por Javier González, su socio musical desde 1989 a la fecha.

Ha estrenado muchísimos tangos de última generación. A mí, particularmente, me gustan mucho su milonga candombeada “Casorio al huevo” y “Café abierto”, ambas piezas también, con música de González, una con letra de Alberto Ortiz, la otra, de nuestro querido amigo Héctor Negro.

Nació en Gerli, Provincia de Buenos Aires, muy cerquita de la Capital. Desde niña se dedica intensamente al canto, lo que la lleva a estudiar guitarra, técnica vocal, interpretación y teatro con prestigiosos maestros. Fue alumna en la Escuela de Música Popular de Avellaneda.

Su debut profesional fue en 1984. Con Javier González grabaron cinco discos compactos y están preparando un sexto que contendrá una nueva obra integral de estrenos tangueros, incluyendo un tema del poeta uruguayo Mario Benedetti.

Pese a ser una muchacha joven, tuvo una intensa trayectoria. Se presentó en los más importantes escenarios argentinos, en festivales nacionales e internacionales en Alemania, Finlandia, España, Chile, Uruguay y Brasil, donde obtuvo reconocimientos y premios. Fue la intérprete de “Pompeya no olvida” en el Festival SADAIC de tangos inéditos de 1998, que obtuvo el tercer premio.

En 1993, fue convocada por Osvaldo Piro para integrar su orquesta y participar en su disco Minón Tango. En los años 2005, 2008 y 2009, Piro la invitó nuevamente, y cantó en el Teatro Libertador de Córdoba y en el Festival de La Falda, junto a la Orquesta Metropolitana que dirige el bandoneonista.

A partir de 1995, la encontramos cantando como artista invitada, en la Orquesta Nacional de Música Argentina «Juan de Dios Filiberto», con la dirección de Piro, Néstor Marconi y Oscar De Elía. Con esta agrupación se ha presentado en el Teatro Nacional Cervantes, en la Biblioteca Nacional, en el Palais de Glace.

En 1996, actuó junto a Raúl Lavié y José Ángel Trelles, en el espectáculo Qué has hecho de mí dirigido por Betty Gambartes. En 2003 y 2008, protagonizó la operita María de Buenos Aires, con música de Astor Piazzolla y guión de Horacio Ferrer y hace una importante gira por Italia donde dio 20 recitales.

Ejerce la docencia en técnica vocal e interpretación desde 1988, dirigiendo su propia escuela.