penas nació ya estaba destinado a ser bacán, tercer hijo de un poderoso político y agrimensor y criado en el Palacio Videla Dorna de avenida Rivadavia 4929.

Como la mayoría de los de su estatus, tuvo una sólida formación y creció rebelde. Ya contaba alrededor de 15 años cuando desafió algún mandato familiar y abrió la puerta del tango. De a poco, comenzó a tallar en bailes y a ganarse un espacio.

Después, allá por 1909 o 1910, viajaría a París junto con Ricardo Güiraldes, entre otros, y mostraría el tango en la mansión del conde Rescke.

Muy pronto se hizo de amigos bacanes como él, que al bailar sin cortes ni quebradas contribuyeron al «adecentamiento» del tango. Así pues, en 1913, cuando la Sociedad Sportiva Argentina –dirigida por el barón Antonio De Marchi– organizó el concurso de baile en el Palace Théatre de la calle Corrientes 757, fue miembro del jurado presidido por Julián Aguirre junto con Armando Chimenti y su gran amigo Vicente Madero.

Daniel Videla Dorna bailaba un tango elegante, caminado y «sin firuletes», que dejó tras la Primera Guerra para dedicarse a la política, la hacienda y la familia. Pero no solo fue un importante difusor de la danza de tango, sino uno de los que asentaron el «tango liso» –sin destrezas–, que otros llamarían «tango de salón».

Profesor, bailarín e investigador del tango danza. Es autor de Nuevo Glosario de Tango Danza, La Pista del Abrazo, Tango FAQs y Los Legionarios del Abrazo – Historia del tango danza 1800-1983. www.tangosalon.com.ar / info@tangosalon.com.ar