ue el hombre que engrandeció la radiotelefonía argentina aunque muchos ni lo recuerden cuando se conmemora alguna fecha grata de la misma.

Era técnico y le entusiasmaba todo lo atinente al ramo y por consiguiente la radiofonía para la cual fabricaba los aparatitos a galena cuando esa industria estaba en pañales.

Funcionaban las radios Cultura (estación Palermo), Argentina, Sud América y alguna otra cuando lo entusiasmó a Manuel Penella, que disponía de suficiente dinero, a fundar otra y así nació en 1924 la LOY Radio Nacional (estación Flores) donde se ocupó de todo su desenvolvimiento, haciendo a la vez de locutor.

Por 1927 la emisora pasa a manos de Jaime Yankelevich y él queda, por espacio de ocho años, como director artístico creando la Primera cadena argentina de broadcastings. En 1935 la Editorial Haynes fundó LR1 Radio El Mundo y desde el primer momento se hizo cargo de su dirección artística, cargo que desempeñó hasta 1943 año en que funda la organización artística ORA Años después dirigió las radios Callao (él la llamó Libertad), Splendid, Belgrano de nuevo.

Nadie puede negar que dio preferencia a nuestra expresiones musicales, camperas y ciudadanas, ajustando a los mejores programas a criollos estilistas y orquestas típicas. Nunca nuestro tango estuvo mejor defendido que cuando él dirigía esas emisoras.

Por 1925 llevó un par de veces al dúo Gardel-Razzano, a cuyos componentes conoció por ese entonces, a cantar a la LOY de Flores, abonándoles $ 500,00 por audición, y años más tarde cuando la radio era un hecho, contrató a Gardel a $ 700,00 por seis canciones en cada presentación, cosa que indignó a Yankelevich, su nuevo dueño, que no quería gastar, y llevó a un malestar entre ambos que duró mucho tiempo y que reverdecía a cada nuevo contrato que subscribía con el gran Carlitos u otra primerísima figura.

Entre sus innumerables anécdotas vividas con Gardel, tiene una de muy subido tono y es la siguiente: «En los estudios de Radio Belgrano estaba conversando con Carlitos cuando llega Razzano afónico, sin poder hablar. Después de las preguntas de rigor de qué le andaba sucediendo, Gardel con una de sus clásicas salidas le dice: «Hacete unas gárgaras con el flujo de fulana (aquí el nombre de una popular cancionista que, según el ambiente, mantenía relaciones amorosas con él)... que es el mejor remedio y mañana estarás sanito» ante la impotencia de Razzano, las risotadas suyas y del cantor por salida semejante)».

Actuó en la película Ídolos de la radio del año 1934.

Escribió una docena de canciones, con músicas de Eddie Kay, de las cuales el vals “Promesa”, primera que hizo en 1933, grabó Carlos Gardel.

Pablo Osvaldo Valle nació en Buenos Aires (Palermo) el 10 de mayo de 1905.