ue uno de los artífices del éxito alcanzado por Azucena Maizani en su gira por España en 1931, y Portugal y Francia al año siguiente. Él al piano y Roberto Zerrillo al violín, acompañaron musicalmente a nuestra gentil intérprete en aquella triunfal excursión cuando entonaba nuestro cancionero en aquellos escenarios.

De regreso siguió un tiempo más con la Maizani con quien colaboró en el Teatro Comedia en la obra musical de Manuel Romero La canción de Buenos Aires, para la cual compone el tango del mismo nombre.

Estudió con su padre, que era director de banda en Rosario, y niño aún debutó en el Cine Belgrano de aquella ciudad como pianista de la orquesta de Abel Bedrune por los años 1917-18. Luego todos los cines y teatros rosarinos, como cafés y recreos, lo conocieron actuando; también con la compañía Arata-Simari-Franco en el Teatro Olimpo en 1925.

El año 1928 lo llevó a Buenos Aires ingresando al plantel de Radio Prieto donde secundó la labor de todos los intérpretes de la casa. En 1930 pasó junto a Azucena Maizani con quien estuvo hasta 1935, actuando con ella en Rosario, Paraná, Santa Fe y otras ciudades.

Fue más tarde acompañante de Tita Merello y Ernesto Famá, haciendo por muchos años varieté. Después de ser pianista de Juan Canaro, tuvo la orquesta de su nombre para los carnavales de 1935 en el Club Boca Juniors, año que dirigió la de la compañía del actor Félix Blanco en el Teatro La Comedia de Rosario. Siguió haciendo varieté, radios, teatros, etc. hasta 1966, año en que se retiró.

Su primera composición fue el tango “Usted sabe señor Juez”, de 1929, que grabó la Maizani, con quien dio los éxitos “La canción de Buenos Aires” y “Decí que sí”, esta ranchera con letra de Pidemunt. Un exitazo de muchos cantores, “Vencido”, tango con versos de Héctor Gagliardi; “Notas de bandoneón”, con Cadícamo: “No hay barrio como mi barrio”, “Vieja”, “Una y mil noches”, “La número cinco”, “Sabalaje”, “Viejo suburbio”, total, setenta obras registradas.

A Carlos Gardel lo conoció por 1930 y al encontrarlo en Barcelona en 1932 se comprometió secundarlo con su piano a pedido de Juan Cruz Mateo al separarse allí de Azucena por esos días. Carlitos enterado le pidió que volviera con la cancionista y así lo hizo. Después en cada encuentro con Gardel, éste le hacía casi la misma pregunta: «Cufaro... ¿Cómo anda Azucena?... ¿Anda bien?, le
preocupaba sobremanera la labor de su colega amiga».

«Grabó Carlos “La canción de Buenos Aires” por sugerencia de los directivos de la Odeon y por simpatía a Azucena; no porque yo se lo pedí...», dijo.

Cufaro nació en Rosario (provincia de Santa Fe) el 22 de febrero de 1906 y falleció en Quilmes (provincia de Buenos Aires) el 29 de diciembre de 1972.