Marga (Un pensamiento)

Vals

Tangotexte: Eduardo Moreno

Envuelta con la mágica caricia de una flor,
dormida entre la música que entona un ruiseñor,
pone junto a las cálidas canciones mías
su dulce melodía, tu amor.
Vuelvo con el melódico poema arrullador
que encierra la nostálgica pasión de un soñador,
templado en el genial crisol
de tu hermosura
donde por ti figura mi sol...

Y al alumbrar sobre tu sien con su fulgor la noche azul,
ha de velar la dulce paz que coronó tu juventud,
y en el dulce ensueño
cantará tu dueño:
Adoración de mi gentil ensoñación de trovador,
divina luz en el vergel de la sublime inspiración,
suave poesía,
cálida canción.

Y en el dormido lugar
hasta el rosal de tu jardín,
por tu dulce soñar,
palpitará,
y en el derroche sin par
de su emoción
su corazón
ha de cerrarse al sol.
La mariposa fugaz
volando en alas del candor
sobre tu lecho azul
dispersará
la fraganciosa y sutil
emanación del rosedal
de mi primer amor.