De prestado

El bar,
imagen de otros bares...
la mesa
con sus sillas prestadas...
el Juano,
chaqueta de otro mozo.
El peso de otra espalda,
corazón.

Un sol
calienta en otro cielo,
ventana
que sigue otras pisadas.
Pisadas
nadando en otros pasos.
De lenguas simuladas,
sinsabor.

Y en otra calle, esta calle
ni me busca, ni soy yo
mirando desde mis ojos.
Ni es mi piel, ni es mi color...
ni es mi letra la que sangra,
ni el espejo, mi sudor.
Ni tu espina me lastima,
ni te fuiste, ni yo estoy.

Mi sed
reseca otra garganta,
el tiempo
señala otras edades,
la historia
se escribe en otros libros,
y envuelve otras ciudades
mi reloj.

Mi amor
contaba otras estrellas,
un sueño
dormía en otra parte,
arrugas
de sábanas prestadas.
Lo que no sé explicarte
no entendés.