tendía casas de música en Rosario cuando se hizo autor y cantante.

Por 1925 escribió su primera canción, el tango “Mala mujer” con música de Adelio Zeoli, antecesora de éxitos tales como “Duelo criollo”, su inmortal tango con música de Juan Rezzano que grabaron en su tiempo Ignacio Corsini y Carlos Gardel, llevándolo éste a Europa; “Mi cotorrito bohemio” con música de Manuel Vega, “Mala racha” con el mismo Rezzano, “Pájaro ciego” con música de Antonio Bonavena, tangos; “Hermano gaucho” y “Mamá vieja” zambas con músicas de Juan Larenza, las cinco creadas por el citado Corsini; el clásico “Nueve de julio (Bayardo)” de José Luis Padula al que él puso letra y “Rosita”, vals con música de Julio De Caro, que fueron grabados por Agustín Magaldi y otras que aún se cantan con buen suceso como “El favorito [b]”, con Juan Rezzano; “Esta noche” con Carlos Marcucci; “La canción” con Juan de Dios Filiberto; “Desilusión [b]” y “Con la otra” con músicas propias, tangos; “Lucerito alba” y “Ah mi Corrientes porá” chamamés con músicas del paraguayo Eladio Martínez; “La mentirosa [b]”, ranchera con José Luis Padula; “Rosario de Santa Fe”, zamba con Agustín Irusta; “Flores del alma” con Alfredo Lucero Palacios y Latenza, y también “Julia”, “La buena moza”, “Me duele el alma”, “Esta tarde”, “Ni flores ya se ven”, “Copos de espuma”, “Mi luna”, “Tierra gaucha”, “Mal de amores [b]”, hasta llegar a la friolera de mil títulos publicados.

En su trayectoria de cantor formó en 1927 el dúo Bayardo-Rossi con el que realizó una gira con la orquesta de Julio De Caro por Santa Fe, Rafaela, y Paraná presentado por Fernando Ochoa, y más tarde el Bayardo-Palacios con el cual hizo radio y varieté.

Ante los micrófonos realizó actuaciones individuales, bajo la dirección del eminente comediógrafo José González Castillo o integrando los conjuntos de los hermanos Navarrine, Alberto Margal, Alfredo Bigeschi, Antonio Molina. También el dúo Bayardo-Moreno.

En el teatro desempeñóse en varios escenarios e incursionó en el cine actuando en las películas Las aventuras del capitán Richard, El último payador y San Antonio de los Cobres.

Viajó por América y en Europa lo hizo por España, Portugal y Francia.

Colaboró en distintas revistas y publicó los libros Glosas del caminante, Sueños azules, Tierra gaucha, Los pregones, El tango y su historia, Color de tiempo, Mis 50 años con la canción argentina.

Para este compendio sobre Carlos Gardel y sus autores, manifestó: «A Gardel lo conocí en Rosario en 1928, en ocasión de tener que llevarle “Duelo criollo” al cine La Bolsa siendo presentado por Guillermo Barbieri, amigo mío y guitarrista de Carlos. Sería largo enumerar mis encuentros posteriores con él, porque no solo lo vi en Rosario, sino que seguí viéndolo en Buenos Aires en el café Los 36 Billares de la calle Corrientes donde se juntaba con varios autores entre las 5 y 7 de la tarde. Puedo decir que fue para mí un buen muchacho que me estimuló a seguir escribiendo motivos populares y no estoy arrepentido, porque me ha ido bien. Y eso en gran parte se lo debo a él que me dio el espaldarazo cuando yo era un pibe provinciano con sueños de autor».

Fue un luchador tesonero dentro de la sociedad de autores (SADAIC) en la que ocupó altos cargos, como así de la Unión Argentina de Artistas de Variedades.

De los grandes autores quizá él sea el más nuestro, ya que sus obras trasuntan sólo motivos argentinos.

Bayardo nació en Rosario el 3 de marzo de 1905 y falleció en Buenos Aires el 7 de marzo de 1986.