Quiero beber una copa de licor.
Quiero matar todas estas penas.
Quiero olvidarme de todo aquel amor
que de amargura el alma me llena.
Quiero más vino.
Quisiera seguir bebiendo.
Quisiera morir sabiendo
que ha muerto aquel amor.
Que una noche
tan fatal para mi vida,
sin pensar que era querida,
la mujer me abandonó.
¡El borracho! Me llaman donde quiera.
Lloro y río con todo mi interior.
Soy piltrafa de este mundo. ¡Soy borracho!
Y en mi rostro el reflejo del dolor.
Soy borracho vagamundo en las tinieblas,
tambaleo por las calles. Por mi mal.
¡Soy borracho! ¡Tan borracho! ¡Borrachón!
Que en mi mente va muriendo el ideal.
Ya van tres noches de embriagues y con la orgía,
Mis recuerdos son espumas de champán,
y el alcohol subiendo a mi cabeza,
me la pinta entre las garras de Satán.
Y mi rostro inundado de alegría
las carcajadas de mi boca hace brotar.
¡Vivan mujeres, el champán! ¡Viva la orquesta!
¡Viva el borracho que el amor supo matar!