Fiebre del amor que ignoraba mi corazón
nubes de ilusión de un ensueño arrobador,
yo seré la fuente de tu noble inspiración
donde volcarse tus alegrías y tu dolor.
Si mi lirismo es tu fe
tu poesía es mi religión.
(recitado)
Noches de ilusión de un ensueño arrobador.
Del inmortal Dios amor
tal es el gran poder,
que nos conduce al placer
en brazos del dolor.
(recitado)
Sueños, placeres, dolor,
sigue cantando mi bien,
que la canción es también
caricia para el amor
En la noche larga de mi honda desolación
me llegó una vez que a la esperanza me despertó
de tan celestial como campana de nuevo son
la divina voz de Jesucriato me pareció,
Me descubriste al amor...
¡Y yo bendigo tu aparición!
(recitado)
Me llegó una voz que a la esperanza me despertó.