Es el carnaval, con su optimismo arrollador,
restaurando su reinado de alegrías y de amor...
es el mismo baile renovado la emoción
de la misma mascarada que persigue otra ilusión...
Y yo, sin embargo, en el mismo rincón,
la misma nostalgia, la misma razón:
¡otro año esperando la noche que vuelva
cantando a mi mesa, la misma canción!...
El rostro cubierto por un antifaz...
su voz, grave y dulce, cantando aquel vals...
así la recuerdo, como una visión,
de todas las noches de aquel carnaval...
Cualquier carcajada parece su risa...
¡en cada llamado sospecho su voz!...
¡Pero nadie llega hasta mi rincón
trayendo, más vieja, aquella canción!...
Otro carnaval que va volcando en el salón
la ruidosa mascarada portadora de emoción...
Y otro carnaval que va negando a mi rincón
el contagio de su risa y la ternura de su voz...
¿Adónde habrá ido, con otro disfraz?
¡Quizá desde un palco, de mí se reirá!
¡Y yo resignado la sigo esperando,
negando la burla de aquel carnaval!...