Como los grandes

No tenemos mangos, tampoco laburo,
se mueren los chicos por falta de pan.
Los viejos no saben dónde fue su yugo,
tanto que lucharon y así terminar.

Qué fue de los gauchos, bravos, corajudos,
que a puñal y poncho hicieron país.
Qué fue de los grandes que nos liberaron,
del oprobio enorme de enemigo hostil.

Se impuso el dinero y el poder corrupto
que denominaron globalización.
Y nos entregaron, con patas y todo,
a eterno enemigo de nuestra nación.

Nos chupan la sangre cual vil sanguijuela,
y hacia el matadero donde va la res,
nos vienen llevando entre tanto verso,
somos el objeto de espuria avidez.

No seamos tan flojos, nada se ha acabado,
y de aquellos gauchos tomemos valor.
Y como los grandes que nos liberaron
pongamos en fuga al que se atrevió.