(Recitado)
Retacito de barrio que rodeaba mi infancia,
parecita, herrería, cina-cina, portón,
los mocosos que fuimos bajo un sol de bolita,
las colas de mis perros movidas por su amor,
la voz de don Francisco rescatando milongas,
el rumor de las chatas ritmando el corralón…
Geografía pequeña con cielo de recuerdos,
paisajito entrañable que evoca mi canción…
Paisajito guardado en el alma
más allá del cemento del hoy,
pedacito de barrio que buscó su refugio
en el plano de mi corazón.
El lejano almacén de la esquina,
un perfume de menta y cedrón,
el romance que vuelve por las calles del tiempo
y la tarde que el beso alumbró.
Paisajito
de la guitarra acariciando el patio,
del zanjón que tuvo el inocente barco
de papel,
de la leyenda que escribió el cuchillo,
de la historia en tango que citaba el disco
de Gardel.
Paisajito
de aquel amor que se extravió por siempre
y al nombrarte vuelve
del ayer.
Paisajito de quinta borrosa
que de albahaca el abuelo aromó,
de la abuela evocando las mañanas distantes
de su España de cante y bordón.
Los amigos perdidos que hoy veo
con los ojos de ver lo que fue,
paisajito que hoy guarda siempre tibio aquel mate
que cebaba mi madre una vez.
Paisajito
de la guitarra acariciando el patio,
del zanjón que tuvo el inocente barco
de papel,
de la leyenda que escribió el cuchillo,
de la historia en tango que citaba el disco
de Gardel.
Paisajito
de aquel amor que se extravió por siempre
y al nombrarte vuelve
del ayer.